lunes, 24 de agosto de 2009

lunes, 6 de julio de 2009

miércoles, 22 de abril de 2009

La tinta!







Tatuajes Carcelarios


Salillas (2010) llevó a cabo un exhaustivo estudio sobre los tatuajes de los centros penitenciarios españoles en relación con el ambiente marginal y de exclusión social de las poblaciones de dichas instituciones Las partes preferidas del cuerpo son los brazos, en primer lugar y el torso, en segundo lugar. Los motivos religiosos predominaban en presos por delitos de agresión personal y los motivos emocionales en presos por delitos de robo. Suele abundar la presencia de iniciales y ello tiene que ver con las relaciones sociales y la historia social personal de cada individuo

La tecnología en los tatuajes.

lunes, 6 de abril de 2009

Perdurabilidad!


Actualmente, hay tatuajes que desaparecen al poco tiempo de dibujarse y se les llama temporales, otros permanecen durante toda la vida salvo en el caso de que se eliminen con láser. La razón de que estos últimos permanezcan inmutables es que la tinta se asienta en la capa de la dermis, situada bajo la epidermis. La epidermis es la capa externa de la piel que renueva constantemente sus células. Sin embargo, el metabolismo de la dermis no implica este tipo de recambio y, por lo tanto, la tinta no se elimina.

jueves, 12 de marzo de 2009


La palabra tatuaje proviene de la palabra inglesa ''tattoo'', que a su vez proviene del término samoano ''tátau'', que significa marcar o golpear dos veces (refiriéndose este último al método tradicional de aplicar los diseños o plantillas). Los marineros que viajaban por el Pacífico encontraron a los samoanos, y quienes quedaron fascinados por sus tatuajes, equivocadamente tradujeron la palabra ''tatau'' como tatuaje. En japonés la palabra usada para los diseños tradicionales o aquellos diseños que son aplicados usando métodos tradicionales es ''irezumi'' (inserción de tinta), mientras que ''tattoo'' se usa para diseños de origen no japonés.

En español los entusiastas del tatuaje pueden referirse a los tatuajes como ''tattoos'', o el término castellanizado de ''tatu'', aunque ninguno de estos dos términos están todavía recogidos en el Diccionario de la Real Academia Española.